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Colchón de cuna de transpiración máxima:
1. La primera capa de contacto, es un tejido elástico stretch hipoalergénico, de tacto suave y agradable, con máxima capacidad de transpiración.
2. El tejido se acolcha con fibra hipoalergénica que permite la circulación del aire fresco a través de toda la superficie de la funda y evita cualquier tipo de reacción alérgica. Proporciona al bebe un descanso suave, fresco y confortable.
3. Incorpora una cremallera en “L” para poder acceder al núcleo y poder lavar la funda en seco si fuera necesario.
4. Protegiendo al núcleo, el colchón incorpora una funda interior.
5. El núcleo o corazón del colchón está fabricado con Bultex®, es el material líder en espumaciones de calidad, un avanzado material formado por millones de alvéolos irregulares y de diferentes tamaños, agrupados en forma de nido de abeja y que actúan como microsoportes garantizando además un nivel de transpirabilidad máximo, que hace que el paso del aire a través de él, sea del 95%. Siempre con un soporte firme que el bebé necesita para garantizar su sueño y crecimiento correcto.
6. Barrera Total®: la última innovación en tratamientos de protección higiénica. Desarrollado por Pikolin, un tratamiento permanente contra ácaros, bacterias y hongos que protege al bebé de cualquier elemento alérgico. Un tratamiento totalmente inocuo para bebés.
7. Altura: 12,5 cm.
El sueño y los bebés con los colchones de cuna:
Durante la primera infancia, los niños dedican la mayor parte de su tiempo a dormir. Hasta los dos años pasan unas 9.500 horas durmiendo (13 meses) y 8.000 despiertos (11 meses).
Igual que los adultos, cada pequeño tiene su propio ritmo y sus necesidades de sueño.
Los recién nacidos duermen una media de 16 horas diarias.
Esta necesidad va cambiando a medida que crece, de uno a tres años debería dormir unas 12 horas al día, entre cuatro y cinco años una media de 11 horas.
A partir de los seis años las necesidades de sueño van disminuyendo una hora cada año aproximadamente.
La calidad del sueño es determinante para el crecimiento de los niños, mientras el bebé duerme crece física y psíquicamente.
De esta manera, el sueño es una parte esencial de su desarrollo, ya que durante el mismo se produce en el bebé el proceso fundamental de conexión entre las terminales nerviosas. De hecho, el nivel de inteligencia del niño se está determinando durante esos primeros años de vida y fundamentalmente cuando el niño está dormido ya que es cuando se segrega en mayor cantidad la hormona del crecimiento.
Esta hormona es también la responsable de determinar la futura talla del niño, junto con la carga genética.
La elección del colchón adecuado se convierte en una clave que afectará al crecimiento del bebé.
Por eso en Pikolin nos esforzamos por ofrecer productos diseñados para cumplir todos los requisitos que aseguran un descanso seguro, confortable e higiénico del bebé.
Todas y cada una de las capas que conforman el colchón cumplen una función específica, con un único objetivo: favorecer el correcto desarrollo del pequeño.